Abstract

La interventoria es uno de los elementos más importantes, para la buena ejecución de los contratos en salud, donde se compromete el objeto del mismo, sus especificaciones técnicas y el buen servicio para el usuario. Todo contrato debe estar vigilado por una interventoria, que es realizada por un agente diferente a las partes que celebraron el contrato, que se encarga de hacer cumplir el objeto y las obligaciones concertadas. Esta permite a través de la aplicación de herramientas, la optimización de los recursos, y la adopción de correctivos. No es una herramienta de simple reducción de costos, en detrimento del derecho constitucional a la salud; por ende a la vida. Busca a través de una supervisión con método de planeación aceptados, verificar el cumplimiento de lo contratado, controlar, prevenir y verificar su aplicación que arroja unos insumos de evaluación que son procesados, para mejorar los servicios de salud de los ciudadanos, actividad que debe ser asumida no por el interventor, sino por la entidad contratante dentro de los planes de mejoramiento continuo. En primer lugar se realizara una aproximación legal a la interventoria de contratos a través de la ley 80 de 1983, (rige la contratación de la administración publica) y otras normas que complementan.