Abstract

El propósito de este proyecto es diseñar un protocolo mixto, que desde la teleconsulta disminuya los desplazamientos al centro asistencial de los pacientes que están en seguimiento antitabaquismo, pero que al mismo tiempo se fusione con los protocolos presenciales cuando sea necesario; los cuales deben tener un grupo consolidado de especialistas (toxicólogo, psiquiatra, psicólogo, trabajador social, enfermero, médico entre otros), para evitar la deserción del tratamiento, mejorar el seguimiento y evitar las recaídas. Esto con el fin de que el paciente sienta respaldo y compromiso por parte de los profesionales de la salud, y así fortalecer sus actitudes frente al proceso de deshabituación del tabaco; mejorando la salud de los pacientes, flexibilizando la atención, optimizando la recolección de datos, la cual es un insumo vital para valorar el proceso; y disminuyendo el impacto de un problema de salud pública. Por último, fortalecer los tratamientos por medio de la teleconsulta es un aporte imprescindible en tiempos de pandemia, como la del COVID-19, por la que atraviesa el mundo, ya que contribuye a mantener las medidas de autocuidado que hoy forman parte de la cotidianidad. La pandemia, un asunto de salud pública de escala mundial, ha permitido que cada vez más personas se acerquen a la virtualidad, que se consolide el teletrabajo y se cambien los paradigmas de las telecomunicaciones. En este sentido, es importante instaurar una idea muy productiva a la hora de pensar en la fusión de las actividades de los profesionales de la salud y la teleconsulta como herramienta virtual. Este proyecto parte de la necesidad imperante de hacer un seguimiento integral del paciente en deshabituación tabáquica, mediante el uso de una herramienta migrada a la virtualidad, con el fin de lograr alcances más óptimos y sostenimiento en el proceso de abandono de la dependencia a la sustancia.