Resumen

Introducción: En gimnasia artística es común la exigencia de tener figuras livianas, pues más allá del aspecto estético puede conferir ventajas en los movimientos ejecutados. Esto aunado a la falta de programas de educación nutricional ha generado que algunos lleven una alimentación desequilibrada o dietas restrictivas sin supervisión, pudiendo así disminuir el rendimiento. Objetivo: Evaluar la implementación de un programa educativo en alimentación y nutrición enfocado a gimnastas masculinos de categoría prejuvenil de la liga Antioqueña y de Norte de Santander. Materiales y métodos: Estudio cuasiexperimental de evaluación antes y después. Se elaboró una línea de base sobre conocimientos y prácticas de los deportistas en alimentación, hidratación y suplementación; posteriormente se realizaron sesiones educativas donde se abordaron estos temas y finalmente se evaluaron los cambios con el test McNemar con significancia del 5%. Resultados: Participaron 19 gimnastas entre 8-14 años quienes entrenaban 6 días a la semana en promedio 6 horas diarias; tras la intervención se observó mejora en los conocimientos sobre los alimentos que aportan grasas (p<0,001) y la frecuencia diaria recomendada (p=0,008), así mismo hubo mejora en los conocimientos sobre el número de intercambios de frutas, verduras y lácteos (p<0,001). Para el consumo de alimentos, según las guías alimentarias, no hubo cambios. Conclusión: El programa ayudó a mejorar conocimientos sobre el consumo de grasas y de algunas porciones, pero no evidenció diferencias significativas en las prácticas alimentarias. Se requiere realizar intervenciones educativas orientadas a mejorar los hábitos alimenticios, que incluya a cuidadores, familia, entrenadores y abordaje del entorno.